
10 Ago Gracias por Elegirme
Hay quienes lo llaman casualidad. Están los que piensan que es cosa del destino. Otros lo ponen en manos de Dios y por qué no, aquellos que confían en el universo. Yo lo voy a llamar “Mi elección”.
Cada instante en mi vida, soy yo quien decido tenerlo. Decido respirar, decido mis sueños, decido decir SI o NO, decido pedir perdón o perdonar, decido elegir a quién quiero tener a mi lado y a quién dejar marchar.
Las personas van y viene. Todas tienen algo que mostrar, algo que enseñar, pero soy yo quién decido en cada momento lo que necesito aprender. Es por ello que te elijo a ti, a ti, a ti… y a todos vosotros que formáis parte de mi entorno. ¡Si! no me he olvidado de ti, aunque me hayas hecho daño, también te elegí.
Hace tiempo, alguien habló sobre la diferencia entre decir “gracias” y “gracias por…”. Diréis, ¿a estas alturas no sabes cuál es la diferencia? Si, la sé, pero es curioso observar la cantidad de veces que decimos un simple “gracias” y lo que nos cuesta expresar el reconocimiento que hay detrás de “gracias por…” ¿Lo habéis probado? ¿Cuántas veces dais las gracias, reconociendo aquello por lo que estáis agradecidos? ¿Os cuesta lo mismo decir una cosa u otra? ¿Cuándo lo recibís de otra persona, lo sentís del mismo modo? Me he dado cuenta lo mucho que me gusta que me lo digan, esas sensaciones que se despiertan en mi interior y que sin embargo, con mi silencio impido que otros las reciban. Es por ello, que hoy decido cambiarlo.
Gracias por enseñarme que cada problema que reside en ti, habita en mi.
Gracias por hacerme preguntas, que me ayudan a colocar una pieza más en mi puzzle.
Gracias por darme tu interpretación, pues esclarece mi oscuridad.
Gracias por tu intervención, pues confirma mi posibilidad.
Gracias incluso por el daño que me hiciste, de él también aprendo y me hago más fuerte.
Gracias por mostrarte como eres, pues me hace ver lo que tengo o de lo que carezco.
Gracias por hacerme entender, que amarse a uno mismo, es ser capaz de amar a quienes nos rodean, pues de algún modo todos formáis parte de mí: sois el espejo en el que se reflejan mis sombras.
Por último y no por ello menos importante, gracias a mi por haberte encontrado, gracias a vosotras por haberme elegido.
Os quiero. Me quiero.
Si te ha gustado, agradeceré mucho que hagas clic en alguna de las redes sociales de abajo porque me estarás ayudando a seguir adelante con el blog. ¡Muchas gracias!
No Comments